martes, mayo 13, 2008

Me hace mal el agua Ser

Me pasa algo curioso. Cada vez que tomo agua Ser (de cualquier gusto) me duele la cabeza. ¿Hay alguna explicación científica? ¿Le pasa a alguien más?

Ustedes, queridos bloggers, ¿tienen reacciones extrañas frente a ciertos productos? Cuentenmé, por favor, que estoy ansioso.

jueves, mayo 08, 2008

Lo que faltaba: ceniza volcánica

Hace poco me preguntaba cuál era el próximo desastre que se abatiría sobre la castigada población porteña. Pero ni en mi peor pesadilla pensé que íbamos a tener que soportar ¡¡¡ceniza volcánica!!!

lunes, abril 21, 2008

Basta, Arnet

Que las publicidades en general son cada día más boludas es una dura realidad que debemos soportar día a día. Pero esta gente de Arnet ya está llegando a extremos de imbecilidad alarmantes.

La propaganda de los osos panda tiene que haber sido obra de alguien con muchas pero muchas ganas de irritarnos a todos, que ya tenemos que soportar bastante con el humo, Cristina y demás.

jueves, abril 17, 2008

Hijos de puta

En este blog se suele intentar ser elegante y evitar la agresión. Pero hay que decir que estos productores agropecuarios que están quemando pastizales afectando a millones de personas con el humo para maximizar ganancias son unos HIJOS DE MIL PUTAS.

jueves, abril 10, 2008

Olor a humo

Me parece que se están pasando de pelotudos. Ayer a la noche en San Telmo había un olor a humo terrible. Incluso adentro de mi departamento.

Por lo que dicen lo provoca la quema de pastizales en Zárate y el Delta. ¿No hay nadie que les diga "muchachos paren de quemar que el humo cubre todo Buenos Aires"? Realmente insólito.

martes, abril 08, 2008

Peor Simpson

Ya sabemos, Los Simpson son geniales. Personalmente, me sé varios capítulos de memoria. Campo Krusty lo debo haber visto 200 veces, sin exagerar, y todavía me divierte.

Pero vamos a ser sinceros, las últimas temporadas son malísimas y la película, aunque nadie se atrevió a decirlo, es un asco.

Y ya que hablamos (un poco) mal de la serie más exitosa de todos los tiempos, les propongo una pequeña encuesta. ¿Cuál es para ustedes el peor personaje de Los Simpson?

Yo tengo tres que me irritan:

  • El Capitán. Jamás me sacó una sonrisa con sus chistes marineros.
  • Disco Stu. Lamentable. Ganó demasiado protagonismo en los últimos tiempos.
  • Mel Patiño (no confundir con Bob). Sus largas parrafadas intelectuales son aburridísimas.

  • miércoles, marzo 26, 2008

    Cacerolazo cheto y represión piquetero-parapolicial

    "La historia se repite una vez como tragedia y luego como farsa", decía alguien por ahí. Y la verdad es que lo de ayer a la noche fue bastante penoso. Primero, toda esa manga de chetos de Barrio Norte y Recoleta que veían peligrar seriamente la posibilidad de comprarse otra 4x4 yendo a protestar a Plaza de Mayo.

    Nunca se vio tanto rubio de camisita Polo protestando en la Plaza, pero bueno, a fin de cuentas tienen derecho a expresar su opinión, no estaban agrediendo a nadie. Pero claro, el impresentable de D’Elía vio que su sueño setentista se cumplía y decidió ir a recuperar "su plaza" con su grupo de patoteros.

    Y bue, se encontraron cara a cara los chetos garcas con el gordo cabeza y salió eso: un paso de comedia ridículo, pero que nos llena de angustia a todos. Muchachos, por qué no nos nos sentamos a hablar un poquito… que hablando la gente se entiende.

    miércoles, marzo 19, 2008

    El precio del Jorgito

    Hace unos minutos me compré un Jorgito de chocolate en un kiosko de Paseo Colón y Moreno y me salió $ 1,25. El precio estaba marcado en el envase del alfajor y de entrada me pareció un tanto exagerado, pero con la inflación que hay perdí noción de los valores de las golosinas y de casi cualquier producto.

    Sé que su precio histórico durante la Convertibilidad era de 50 centavos. Pero creo haberlo comprado a 90 centavos a fines del año pasado...

    ¿Fui estafado o es el precio de venta en todos lados? Por favor, ¿me pueden decir cuánto sale un Jorgito en sus barrios? Muchas gracias!

    lunes, marzo 17, 2008

    Enigmático

    Me enteré de que una blogger estrella amenazó de muerte a una productora de radio porque no la invitó al piso para hablar sobre su blog. ¿Será posible?

    Primera pista: Las iniciales son LB.
    Segunda pista: Tiene un blog muy parecido a Ciega a Citas.

    jueves, marzo 06, 2008

    ¿Se viene la masacre flogger?

    Algún día tenía que pasar… Que subieran fotos de ellos mismos vestidos de payasos o haciéndose los glam vaya y pase… pero juntarse todos en el Abasto y hacer una suerte de fiesta regodeándose en su propio vacío y estupidez sonaba como demasiado.

    Ya le estaban colmando la paciencia a muchos y bueno, el miércoles pasado se juntaron y los surtieron. Hay quienes dicen que fueron darks o alguna otra tribu urbana. Me parece más probable que haya sido alguna banda de punguistas.

    Pero no descarto la posibilidad de que se trate de gente como la amiga blogger Cecil, que simplemente se cansó de tanta pelotudez y pasó del dicho al hecho y resolvió cagarlos a trompadas.

    Si no saben de qué hablo, entérense acá: http://www.criticadigital.com/index.php?secc=nota&nid=271

    lunes, marzo 03, 2008

    Un tornado arrasó a mi ciudad

    Ayer iba en auto por la Panamericana cuando veo dos torbellinos de viento a lo lejos. A riesgo de quedar como un pelotudo exclamé: "Perdón, pero eso que está ahí no son dos tornados???!!!!"

    Uno de mis compañeros de viaje me dio la razón y otros dos prefirieron no creer lo que era evidente: dos tornados en Buenos Aires, algo nunca visto… Es cierto, finalmente estaban sobre el río, pero bueno, no deja de ser insólito.

    Ahora bien, en Buenos Aires tuvimos recientemente granizo, nevada y tornado. Evidentemente con este desorden climático cualquier cosa puede pasar. Por lo que pregunto, ¿cuál será el próximo desastre natural que se abatirá sobre la Ciudad?

    ¿Tsunami, terremoto, tifón, huracán, sequía, tormenta de arena? El que acierta se gana una licuadora.

    lunes, febrero 25, 2008

    Kiosquito

    El servicio de Metrovías tiene varias deficiencias que no vale la pena enumerar porque son por todos conocidas. Pero si hay algo que me parece decididamente insólito es la idea de agregarle un kiosquito a la boletería en varias estaciones, como en Lavalle o Scalabrini Ortiz.

    En el subte las cosas deben ser simples y veloces. No puede ser de ninguna manera que alguien pida "dos boletos, un paquete de Sugus de menta y una Coca Cola Light". El boletero está para vender pasajes y nada más, señores empresarios.

    ¿O no les alcanza con los subsidios millonarios del Estado que además tienen que vender alfajores Jorgito?

    martes, febrero 19, 2008

    Llamen a la Policía!!!

    Si hay algo que no me gusta es ponerme la gorra y ser vigilante. pero cuando alguien es tan descaradamente chorro y delincuente me hierve la sangre. Desde hace un tiempo sigo Ciega a citas, un simpático blog sobre una chica que busca un "novio normal" para llevar al casamiento de su hermana.

    Y ahora veo que en Clarin.com hay una periodista, Lorena Bassani, que resolvió sacar un blog igual, titulado Quiero un novio.

    ¿Qué hay que hacer? ¿Llamar a los bomberos, al INADI, a la Policía, a Batman? ¿Cómo se puede ser tan chorro?

    viernes, febrero 15, 2008

    San Valentín

    Hay pocas cosas que me den más vergüenza que caminar con una flor en la mano. No sé si llevarla hacia arriba, hacia abajo, o escondida detrás de la espalda.

    Me parece que todo el que me cruzo me lanza una sonrisita irónica y piensa “qué nabo!”. Hasta el que me vendió la flor se debe reír. Sólo que no lo exterioriza porque es su fuente de ingresos.

    Pero bueno, es un día al año y hay que tragarse el orgullo. Ah, y prepararse para el 21 de septiembre…

    lunes, febrero 11, 2008

    Prepaga careta

    El otro día, caminando por Alem y Corrientes me encontré con un cartel que me sublevó. Era la publicidad de la prepaga OSDE Binario que tenía la imagen de una guitarra eléctrica con el cartel de “se vende” y decía algo así como que si tenés entre 25 y 32 años “tu vida está cambiando”.

    O sea que para estos genios a los 32 años ya no puedo tocar más la guitarra, salir de noche ni ir a recitales. Sólo me resta empeñar mis instrumentos musicales y dedicarme a laburar, casarme y procrear. Les pido por favor que se metan su amargo plan médico donde más les guste.

    martes, febrero 05, 2008

    Murgas, esa calamidad

    Años de investigación y estudio me han conducido a la siguiente conclusión: La murga porteña es la expresión más baja de la cultura occidental.

    Desconozco si en Angola, Laos o Samoa existe una forma de arte más vulgar, pero en cuanto a países occidentales se refiere, estoy convencido de que no hay nada que sea más feo y deforme que un montón de idiotas disfrazados dando pases de baile espasmódicos al ritmo de tambores.

    Para todo esto, además, se cortan las calles de la ciudad sin tener en cuenta si la mayoría de los porteños queremos disfrutar o no de semejantes esperpentos.

    Convengamos en algo. La alegría y el carnaval son brasileros. Dejemos a los vecinos con sus majestuosas escolas do samba y terminemos nosotros con esta farsa inmunda a la que asisten tres gatos locos tirando espuma y rompiendo las bolas a los demás.

    viernes, febrero 01, 2008

    Inundación (primera parte)

    Tumbado en uno de los asientos del avión sanitario del ministerio, no podía dejar de pensar y cuestionarme mi existencia. ¿Quién carajo me había mandado a mí a especializarme en catástrofes sanitarias? ¿Para qué tanto seminario, el master? Qué boludo, por Dios, podría hacer cirugías plásticas y llenarme de oro, como Pitanguy y Barrenechea, pero no, clavado como un imbécil en un puesto de mierda. Hasta las pelotas, hasta las pelotas estaba de los inundados, los damnificados, los menesterosos, los pobres y sus enfermedades.

    Después de un breve sueño, ayudado por tranquilizantes y un poco de whisky que llevaba en una petaca del impermeable, bajé la escalerilla del avión en el aeropuerto de Santa Fe. El tiempo era espantoso. Una lluvia tremenda, frío, un viento que te volaba. De ahí hice media hora en una 4x4 conducida por un guardaespaldas del gobernador González. El agua prácticamente tapaba las ruedas, hasta que llegamos al cuartel de bomberos. Allí me subieron a un botecito y me dieron unas botas. Mientras navegábamos pensaba en pegarme un tiro apenas volviéramos a Buenos Aires. No podía soportar la lluvia mojándome la cara y la desolación que encontraba a medida que nos acercábamos a nuestro destino, el polideportivo del club Colón, en las afueras de la ciudad.

    Había recibido informes de que la situación era caótica en el centro de evacuados. Faltaba de todo y se registraban peleas constantes por comida y abrigos. Mi tarea, penosa como pocas, consistía en coordinar aquel desastre. Además, tenía que tratar de instruir a las mujeres sobre métodos anticonceptivos, ya que la provincia tiene uno de los índices más altos de embarazos adolescentes en el país.

    Cuando entré al lugar, pensé seriamente en llamar a Buenos Aires y mandar todo al carajo: en el lugar había 5 mil personas hacinadas, mugrientas, durmiendo en el piso en condiciones deplorables. El olor a suciedad, orina y mierda de bebés casi me descompone. Algunos viejos se me acercaron pidiéndome dinero, comida, cigarrillos, remedios... cualquier cosa. Me condujeron a una oficina que debía ser de algún directivo y tenía las condiciones mínimas de orden y aseo que había solicitado. En el baño privado comprobé aliviado que al menos había una ducha y un bidet.

    Luego me reuní con la gente de la secretaría provincial, que me contó que efectivamente faltaba de todo y que la gente estaba desesperada, al borde de la rebelión. Acordamos hacer un rápido minicenso para detectar posibles focos de enfermedades y evitar una situación de epidemia dentro del lugar. También, hacer una limpieza generalizada, con ayuda de los insólitos voluntarios de una ONG local. Al ver a esos jóvenes yo pensaba dónde estaría si hubiera tenido la menor oportunidad de decirle que no al ministro Frías. Pero bueno, el Gordo había tapado el tema de los retornos en la compra de vacunas, así que no me quedaba otra.

    En fin, cuestión que me dormí una siesta en la fea camita de la oficina. Me desperté todo dolorido y sin ganas de trabajar. Aún así, les ordené a los médicos de la gobernación que juntaran a un grupo de 100 mujeres de entre 11 y 45 años para intentar explicarles el uso de métodos anticonceptivos. Me habían pedido en Buenos Aires específicamente que lo hiciera. No entendía bien por qué, total un bebé más un bebé menos en esas circunstancias... Tras la charla repartimos preservativos y pastillas a granel.

    Luego pasé por la cocina, donde me informaron que había fideos y polenta para dos días más. Ordené achicar las porciones y me fui a mi refugio a cenar algo apenas mejor que la miserable comida de los evacuados. Al terminar, me desnudé y me metí en la cama, abrigado por unas frazadas de mala calidad.

    Soñé con una prostituta que me había hecho un masaje en un sauna de Recoleta. En lo mejor, cuando el masaje se volvía más íntimo, me despertó un ruido atronador. Alguien había puesto cumbia a todo volumen en un radiograbador y se escuchaban gritos y cantos. A las puteadas caminé hacia la cancha de básquet, donde estaba la mayoría de los evacuados. La escena era increíble. Hombres y mujeres bailando al ritmo de una cumbia que no pude identificar...

    (SIGUE)

    miércoles, enero 30, 2008

    Hot Dog

    Como la empresa donde trabajo se mudó cerca de Casa Rosada, a 10 cuadras de mi casa, voy caminando. Además de la inmensa felicidad que me provoca no tener que subirme a subtes ni colectivos dos veces al día, la caminata me sirvió para observar ciertos aspectos que desconocía de la dieta del ciudadano de a pie.

    En estos días vi que muchos hombres (hasta ahora ninguna mujer) se clavan un panchito antes de las 10 AM, a modo de desayuno, en uno de los tres carritos que hay en tan breve trayecto. Le ponen mostaza, ketchup, mayonesa y no falta aquél que incluye papas fritas en el menú.

    A veces me dan ganas de frenar a alguno de estos muchachos para advertirles que su dieta no parece ser del todo sana, pero bueno, si yo me castigo con McDonald’s, no puedo tirar la primera piedra...

    jueves, enero 24, 2008

    Me encanta

    Ayer a la noche llamé al delivery de McDonald’s. Cuando terminé de dar mis datos (era la primera vez que llamaba de casa y por poco me piden el grupo sanguíneo) me informaron que el tiempo estimado de demora era de 2 horas (¡!). Les di el ok, pese a que me pareció poco elegante que me avisaran de su desmedida demora luego de hacer el pedido.

    Finalmente, alrededor de 1 hora y media después, tocaron el timbre y bajé a abrir. Una amable joven me entregó la caja que traía las hamburguesas y las papas fritas, dos botellitas de Coca y el vuelto.

    Lo extraño del asunto es que la chica no había venido en moto ni en bici ni caminando, sino en taxi. Tras darme el pedido volvió a subir al coche y se fue, para continuar con su vital tarea. Qué nivel el de McDonald’s, que envía a sus empleados a repartir hamburguesas en autos de alquiler. Me encanta.

    martes, enero 22, 2008

    Héroe

    El sábado pasado me pasó algo increíble: durante un cumpleaños infantil salvé a un chico de ahogarse en una pileta. Estaba en una quinta y el inocente niño (9-10 años) se arrojó a lo hondo sin saber nadar. Inmediatamente comenzó a gritar “me ahogo, me ahogo” y a hundirse.

    En un primer momento pensé que estaba jugando para que los amiguitos simularan ir a rescatarlo, pero como empezaba a tragar agua, me di cuenta de que era real. Mi novia, que se encontraba al lado mío, salió lentamente en busca de ayuda, mientras yo me arrojaba al agua para rescatar al niño.

    Debo confesar que tuve miedo de irme al fondo de la pileta con chico, pero afortunadamente eso no ocurrió. El pibe me abrazó del cuello y lo llevé hasta el borde de la pileta, donde esperé a que me ayudaran a sacarlo.

    Luego me comentaron que al dejar al chico en la quinta, la madre había solicitado que lo cuidaran “por favor”, porque era la primera vez que lo dejaban solo. Y que de tan bueno a veces parecía boludo.

    Creo que es lo más importante que hice en mi vida.

    viernes, enero 18, 2008

    Por un nuevo código de vestimenta urbana

    El otro día vi pasar por San Telmo a una pareja de la mano. La peculiaridad era que la chica tenía puesto un short de jean y arriba sólo la parte superior de una bikini. Era bastante sorprendente, pero lo pensé un poco y estaba perfecto.

    Pienso que en Buenos Aires, cuando hacen temperaturas extremas, tipo 40 grados, debería estar aceptado -y me refiero a socialmente aceptado- alivianarse un poco de ropas.

    Creo que debería cambiar el código de vestimenta en la Ciudad. Las mujeres podrían andar como esta chica y los hombres en cueros arriba y pantalón corto. En tiempos de agujero de ozono y suba insoportable de la temperatura no veo por qué la gente no pueda vestirse como lo hace en un lugar de veraneo de la Costa.

    lunes, enero 14, 2008

    Orgasmólogo

    El viernes a la noche llegaba tarde (como siempre) a encontrarme con mis amigos de la facu que se juntaban en John John para tomar una cerveza. Como recién eran las 22 decidí tomarme el tren para luego combinar con el subte en Retiro.

    En la estación Juan B. Justo había bastante gente para esa hora. No tanta, pero en general no hay casi nadie a la noche. En el andén de enfrente, del lado que va para Mitre, estaba esperando el tren una familia conformada por papá, mamá, y un nenito de unos tres años que jugaba con una pelota de plástico.

    Jodiendo, jodiendo, al nene se le terminó cayendo la pelota a las vías. Me dio lástima. Pensé “pobre chico, se quedó sin juguete”. Pero de la lástima pasé al terror, ya que la madre le gritó: “¡Ahora la vas a buscar!”. El chico se puso a llorar, pero, con decisión, la madre lo tomó de los brazos y lo bajó. Yo no lo podía creer. Es cierto que el tren no venía, pero no lo podía creer. El padre, ubicado a unos dos metros, no prestaba atención a la escena. Los demás no dijimos nada. La situación era demasiado insólita.

    Después de un rato no demasiado largo, el nene dio con la pelota y le pidió a la madre que lo levantara. “Primero pasame la pelota”, fue la sádica respuesta de la mujer. Temblando de miedo, el nene le pasó la pelota y después pidió upa con los brazos con desesperación. Entonces sí, la mamá accedió a subirlo y el espanto terminó.

    Sin embargo, no todo había pasado. El padre, que había visto el final de la escena, se metió en la misma a los gritos. “¡Pero Verónica, para qué querés esa pelota de mierda, y ustedes dos, viejos pelotudos, no podían ayudar al nene a sacar la pelota?!”. La última frase iba dirigida a una pareja de ancianos que aguardaba el tren y miraba lo que pasaba sin creerlo del todo.

    Un poco asustada, me acerqué a un chico de unos 25 años que estaba esperando el tren a Retiro. Estaba vestido con bermudas y una remera blanca, y llevaba un bolso deportivo azul. Era bastante lindo además. Alto, morocho y bonito de cara.

    Justo entonces llegó el tren. Me subí y el chico se sentó al lado mío. Saqué un libro de la cartera (Maridos, de Angeles Mastretta) y comencé a ojearlo. Noté en seguida que mi compañero de asiento me estaba mirando. Al rato, como lo esperaba, me habló.

    “¿Está bueno el libro?”. “Sí, muy bueno”, le respondí tratando de no darle demasiada bola. “Vos debés ser una chica muy romántica. Se te nota en la cara… como soñadora, ¿no?”. “Ehhhh, sí puede ser, no sé”.

    “A ver, te hago un test: si vos estás en tu casa y escuchás que llora tu bebé, suena el teléfono, te tocan la puerta los bomberos y la leche hierve, ¿qué hacés primero? ¿Vas a ver al bebé, atendés el teléfono, abrís la puerta o apagás el fuego?”.

    “Ehhh, voy a tratar de calmar al bebé”, le respondí extrañada. Lo más probable era que me quisiera levantar, pero sin embargo su tono no era ese y nunca nadie me había encarado de esa forma.

    “Ahh, muy bien, lo que me parecía, a vos te gustan los nenes y te gustaría formar una familia con alguien que te entienda, que te comprenda, que te lleve el sustento todos los días. A ver… te hago otro: qué profesión te gustaría tener si no fueras… ¿Qué sos?” “Diseñadora”. “Ah y ¿cómo te llamás?”. “Mariana”. “Un gusto, yo Marcelo. Entonces, si no fueras diseñadora, qué te gustaría ser ¿bailarina, médica, jugadora de hóckey o astronauta?”.

    “Médica”, le respondí. La verdad que aunque era extraño, el pibe no parecía nada peligroso, entonces mantenía el diálogo, aunque permanecía alerta. “Lo que te digo, vos sos una persona súper tierna, una chica divina, ojalá yo alguna vez tenga una novia así, siempre me engancho con cada una…”

    Diez tests como esos después llegamos a Retiro. Marcelo se mantuvo al lado mío. Me acompañó al hall y bajó conmigo las escaleras que dan al subte, que ya estaba cerrado y a mí ya me empezó a dar un poco de miedo, porque la estación estaba casi desierta. Pensé en llamar a mi papá o a mi novio (no sé por qué recién entonces me acordé de él) pero no lo hice.

    En cambio salí a la calle con Marcelo, que seguía hablándome de cosas que yo cada vez entendía menos. Algo sobre su mala suerte con las mujeres, sobre lo linda que era yo y las ganas que tenía de tener dos hijas. Mareada, me acerqué al borde de la vereda y estiré la mano casi por instinto. Tuve suerte, ya que enseguida vi que venía un taxi con la banderita roja.

    Un poco más confiada porque ya me iba, no sé por qué, le pregunté a qué se dedicaba.

    - Orgasmólogo.
    - …

    Me metí en el taxi rápido y le di la dirección al chofer. Todavía un poco aturdida, me quedé pensando que hay noches que están llenas de sorpresas aún antes de comenzar.

    martes, enero 08, 2008

    Prohibido prohibir

    Viajar en colectivo es, en cierta forma, un viaje al pasado. No sólo por la angustiante antigüedad de muchos coches, sino por el autoritarismo de los cartelitos. Ya al esperar el colectivo, en algunas paradas subsiste la siguiente indicación: “Forme fila con orden, sin descender a la acera”. Sólo falta que pidan tomar distancia o hacer tres series de 10 flexiones.

    Una vez adentro del colectivo, las prohibiciones absurdas se multiplican:

  • “Prohibido fumar y salivar”. Hay que hacer notar que la primera prohibición parece no regir para los choferes. En cuanto a la segunda, ¿piensan que transportan cerdos o guanacos? Tal vez debería ser todo más explicito, tendrían que prohibir también mear. O quizás habrá que suponer que como no está prohibido está permitido.

  • “Prohibido asomarse y sacar los brazos por las ventanillas”. El día que me quiera mutilar no voy a recurrir a un colectivo, se los puedo asegurar.

  • “Prohibido abrir las ventanillas en época invernal o de bajas temperaturas” Es interesante la aclaración “o de bajas temperaturas”. Tal vez piensen que la gente abre las ventanas con el calendario en la mano. “Ojo, no sea nabo, no sólo en invierno, también si hace frío”, debería decir.

  • “Prohibido hablar con el conductor”. ¿Y si no conozco una calle? ¿Y si no sé dónde bajarme­ a quién le pregunto? ¿A la máquina que da el boleto?

  • “Prohibido bajar por adelante” Bien, es una cuestión entendible, ¿pero tiene que estar “prohibido”?

    El encargado de hacer cumplir toda esta serie de prohibiciones es el señor colectivero, quien, curiosamente, parece tener libertad de infringir todas las reglas de tránsito. Pero ese es otro tema.

  • lunes, enero 07, 2008

    Casualidad

    El viernes fui a cenar con amigos a Dorita, una parrilla de Palermo Viejo. Al salir decidimos ir a tomar un helado (sí, llevamos el reviente hasta el final), pero no sabíamos dónde.

    Yo digo: “Por probabilidad, tiene que haber una heladería a 5 cuadras a la redonda, el tema es dónde”. Mi amigo Leonardo de la Motta alza la vista, señala con el dedo y responde: “Miren, allá a mitad de cuadra hay una, ¿ven el cartel?”. Claramente se leía “HELADERIA”.

    El tema es que al acercarnos descubrimos que la heladería se llamaba justamente “MOTTA”. ¿Qué probabilidades hay de que ocurra algo así? Digo, mi amigo no se llama Freddo ni Massera ni Tucán. Cósmico…

    viernes, enero 04, 2008

    Nos robaron la noche

    Esto del adelanto de la hora me tiene mal. Ayer eran las 21.30 y era de día. No sabía si cenar, desayunar, almorzar o irme a dormir. No logro entenderlo. Si me despierto a las 9 y es de día y a las 21.30 sigue siendo de día, cuándo es de noche? Señores del Gobierno, para pensar…

    jueves, enero 03, 2008

    ¿Cuál es tu rock?

    En otro blog, un amigo internauta me reprochaba amablemente haber puesto a Depeche Mode en la sección “Me gustan”, siendo este un blog llamado “Rockero Hi Fi”. Creo que es aburrida esa tendencia a poner etiquetas y decir “esto no es rock”, “aquello no es rock”.

    El rock es una corriente musical muy amplia, que incluye al pop, el tecno, el ska, el hip hop, el funk, el reggae, el soul, el punk, el metal y una larga lista de etc. y mezclas y fusiones de todo tipo. Si debo confesar algo violento, admito que me gusta Miranda! Y que incluso los fui a ver en vivo, pero también me sé de memoria muchísimos temas de los Redondos.

    Cierro como comencé, con el tema de Los Látigos y te pregunto: ¿cuál es tu rock?

    miércoles, enero 02, 2008

    Amontonados

    Hay algo que no entiendo. Es 2 de enero y supongo que muchísima gente partió de vacaciones. Entonces, ¿cómo puede ser que hoy haya viajado más apretado que nunca en la Línea C? Muuuuy amontonado junto a otras personas bastante transpiraditas. No quiero pensar lo que va a ser en marzo. Un mal comienzo del año laboral…

     
    Locations of visitors to this page Red social de viajes The House Of Blogs TOP 100 WEBLOGS